PEDIDA DE MANO

Al mediodía, tu amor se dirigirá, acompañada de una amiga, tu cómplice, a una sala de cine en el corazón del Barrio Latino.

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Tu pareja y su amiga se ubicarán en el centro de la sala, notando que muchas personas ya han ocupado los primeros asientos. Las luces se apagarán y se proyectarán los avances y los anuncios tradicionales.

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Poco después, la película comenzará a proyectarse. ¡Pero en lugar del protagonista, ¡serás TÚ quien aparezca en la pantalla! ¡Tu amada se quedará sin palabras! El cortometraje te mostrará mientras te preparas en casa, vistiéndote con elegancia, yendo a una floristería a comprar un ramo de rosas rojas y luego dirigiéndote a una joyería para elegir un anillo de compromiso. ¡Una escena digna de James Bond, enriquecida, si estás de acuerdo, con un toque de humor ¡y un toque de locura!

Después, tu pareja te verá, también en la gran pantalla, entrando en una sala de cine que reconocerá de inmediato, con la fachada, las taquillas, el pasillo de acceso, la puerta... ¡ En ese instante mágico, te presentarás en la sala como si la magia del cine se hiciera realidad de repente! ¡Ella no creerá lo que ve! Te presentarás ante ella con un ramo de rosas en la mano y le pedirás que se case contigo, mientras los espectadores sentados en las primeras filas se voltearán para presenciar la escena; ¡tu amada reconocerá a amigos y familiares! El momento será inmortalizado por una cámara discretamente oculta en la sala. En un apoteósico torrente de emociones, te ofrecerán una copa de champán y podrás, cuando lo desees, abandonar el lugar para ir a uno de los muchos restaurantes románticos del barrio...

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